MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

El camino hacia la Nueva Humanidad no debería ser largo, a pesar de ser muy laborioso para la actual consciencia humana.

Mirando a los seres humanos de hoy, muchos se preguntan: “¿De dónde surgirá la Nueva Raza*? ¿Dónde está el nuevo mundo? ¿Será que él aparecerá de un momento a otro, inesperadamente?”.

Hijos:

La Nueva Humanidad es llamada “nueva” porque le hablamos a una consciencia humana que desconoce completamente la verdad sobre sí misma.

Desde el momento en el que la humanidad fue creada por Dios, y este Proyecto divino y arcangélico entró en acción, todo ya estaba cumplido, y la perfección ya estaba manifestada en la materia.

La perfección está escondida, cubierta por capas y más capas de profunda ilusión, que hacen que la consciencia sufra por no poder encontrarse a sí misma en esencia, en verdad.

El sufrimiento más ilusorio de todos es el que ustedes viven cuando están perdidos de sí mismos, porque esta es la hora de la gracia, la gracia de descubrir la verdad.

¿Por qué ustedes sufren por sus imperfecciones, en lugar de buscar la esencia, la verdad?

¿Por qué temen perder algo que jamás les correspondió, para conocer finalmente lo que son, como hijos de Dios?

Muchos se preguntan cómo vivirán en este mundo, en sus vidas tan comunes y humanas, los principios de un Plan que, en verdad, es cósmico y universal. Esos principios, hijos, son internos. La expresión y la manifestación de ellos es lo que transforma la vida sobre la Tierra.

No esperen que el planeta cambie para entonces encontrar las condiciones favorables para la propia transformación, porque son ustedes quienes deben cambiar al mundo. Y no les hablo de un proyecto ideológico, político ni social; les hablo de las pequeñas cosas; les hablo de los actos de fraternidad y de verdadero amor; les hablo de una mirada y de un gesto sinceros para con los que están olvidados; les hablo de un acto de paz para con aquellos que están alterados por el caos del mundo; les hablo de acciones que corten la cadena creciente del mal en el planeta, porque los proyectos sociales son tan humanos como todo lo que ustedes construyeron hasta ahora como humanidad.

Para llegar a algo verdaderamente grande y espiritualmente grande, transformen lo pequeño, lo simple, lo profundo. Y es ahí, a través de su ejemplo, que moverán las estructuras de los incrédulos y harán reflexionar a los que están buscando la verdad y no la encuentran.

Es con el ejemplo que señalarán el camino; es con amor como encenderán una antorcha en este mundo de oscuridad, para que los que caminan ciegos puedan encontrar una salida.

Podría decirles muchas más cosas que las que ya les dije y renovarlos por medio de Mis palabras, pero cuando el padre se aparta, el joven crece y encara la vida y sus dificultades de una forma más madura. No hay otra salida para sobrevivir sino practicando lo que se aprendió.

El hecho de que los Mensajeros Divinos se alejen de sus vidas no es para abandonarlos, sino para hacerlos crecer, porque ya es hora, hijos. Y no solo la sociedad, sino todo el universo reclamará de ustedes ese crecimiento, para que puedan soportar lo que vendrá y para que sean un verdadero triunfo de Dios.

Que en esta reparación de la fraternidad, de la unidad y del amor, ustedes puedan, un día, dejar de reparar la propia consciencia para llegar a la consciencia humana, a los Reinos de la Naturaleza y al planeta, pues más allá de ustedes mismos, hay mucho para ser reparado.

Como buen carpintero y siervo del Señor, Yo los acompañaré siempre.

Su padre y amigo, compañero de todas las eras,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Hijos:

El crecimiento humano muchas veces es difícil y doloroso. Cruzar tantas etapas de maduración física, emocional y mental requiere el esfuerzo y el empeño de quien las vive.

El crecimiento espiritual es semejante al crecimiento humano: los seres viven diferentes ciclos evolutivos que demandan de sus consciencias una madurez cada vez más profunda y consolidada.

En la vida humana física, el ser que crece va asumiendo cada vez más su papel en la sociedad y se responsabiliza de su sustentación y de la construcción de su futuro. En la vida espiritual, el ser que crece y madura va asumiendo su responsabilidad ante el Plan de Dios y se reconoce responsable, no solo de su evolución, sino también de la evolución de toda la humanidad, del planeta y, en consecuencia, del universo.

Este último ciclo evolutivo del despertar de los nuevos soles marca el umbral entre el viejo y el nuevo hombre. Será la hora, hijos, de cruzar espiritualmente ese umbral y de enfrentar los cambios que eso ocasionará en sus vidas; enfrentar las resistencias y los obstáculos impuestos por ustedes mismos a esa maduración, así como lo hace un joven que está en transición hacia la vida adulta y, muchas veces, se resiste a dar ese paso.

Muchos quieren vivir la vida espiritual, aspiran a conocer la verdad sobre sí mismos, sobre este mundo y sobre muchos otros; pero lo que deben comprender ahora, hijos, es que ese paso en la vida espiritual que les permite conocer la verdad sobre toda la existencia genera un compromiso que requiere cierto esfuerzo y transformación.

Eso es lo que sucede con muchos jóvenes que quieren vivir solos, tener la propia casa y el propio empleo, pero que no comprenden que la vida independiente les exigirá un crecimiento mental y emocional inmediato.

No correspondería que consciencias con determinado grado de instrucción no tuvieran el mismo grado de compromiso consciente con el Plan de Dios. Esta, hijos, es la Ley de los universos, de la vida, de la Creación.

Para que nuevos mundos se revelen frente a sus ojos, deberán madurar espiritualmente. Y como ahora el cambio de los tiempos es urgente, y la verdad surge hasta para los que no la quieren ver, la propia condición del planeta exigirá a todos un crecimiento espiritual inmediato y concreto.

Este crecimiento no es más que una transformación verdadera en la consciencia, una respuesta al Creador, con ejemplos diarios de que ustedes comprenden los tiempos en que viven y su responsabilidad en el Plan de Dios.

Hijos, les digo estas cosas porque ya estamos en la última hora, y no leerán más tantas hojas de instrucciones como antes, porque todo ya fue dicho y es hora de ponerlo en práctica.

Por el crecimiento espiritual de la humanidad,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Bienvenidos a un nuevo ciclo de evolución, ciclo que exigirá de todos la madurez espiritual que les permitirá vivir en armonía los tiempos que llegarán.

Este nuevo ciclo será marcado por las pruebas internas, en las cuales las consciencias estarán delante de grandes responsabilidades, con poca experiencia interior para asumirlas. Sin embargo, la adhesión que cada uno presente a la Voluntad de Dios y el esfuerzo por realizarla harán que desciendan del Universo la Gracia y la Misericordia que necesitan para cumplir con su misión.

Hijos, delante de los desafíos que vendrán, siempre digan sí, aunque les parezcan imposibles de ser vividos y superados. Cuando dicen sí, el Creador recibe el permiso para operar verdaderos milagros en sus consciencias y curar en ellas todo aquello que les impide dar el salto que necesitan.

Los desafíos los harán crecer y los prepararán para los ciclos que vendrán después y que serán pruebas mayores y decisivas, no solo para ustedes, sino para toda la humanidad y para todo el universo. No teman lanzarse a lo desconocido ni dar los pasos que los llevarán por caminos que ustedes no saben dónde terminarán.

No teman perder todo, principalmente, perderse a sí mismos, porque, a pesar de dolorosa, esta es la meta de la humanidad. Recuerden que el vacío de sí los conduce a la Verdad, al Arquetipo, al Origen.

Hoy les deseo un inicio de ciclo colmado por Dios y por la vida universal. Este nuevo tiempo estará marcado por el despertar de la humanidad a esta vida.

Todas las ciencias estarán unidas espiritualmente en la ciencia universal y todas las religiones verdaderas tendrán en común la vivencia del amor. El conocimiento y la religión se unirán para develar nuevos mundos y principios universales y descubrirán que la mayor ciencia, que es la vivencia del amor, los conduce a nuevos horizontes, a nuevos universos. Así, ustedes no temerán conocer la Verdad y, con el conocimiento colmado de espiritualidad y la religión plena de sabiduría, cruzarán los portales hacia una nueva vida.

Su padre y amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE LOS COCOS, CÓRDOBA, ARGENTINA, A LA VISENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

La madurez a la hora de servir surge de la comprensión de que un servicio que se presta respondiendo a un pedido de Dios trasciende la materia y tiene su verdadero propósito en el espíritu.

Cuando el Creador los envía a servir, deben tener consciencia de que son meros instrumentos en Sus Manos, ya que, para equilibrar el gran karma humano, es necesario que sean los propios miembros de la humanidad los ejecutantes e intercesores de este acto de equilibrio.

¿Qué temen cuando los enviamos a servir? ¿Acaso están pensando que serán sus manos las que van a actuar?

No pierdan más tiempo con expectativas, ansiedades ni tampoco con orgullos ni vanidades. Concéntrense en ser verdaderos y simples, obedientes, mansos, vigilantes y pacíficos. Concéntrense en estar unidos a Dios y en pensar en Él todo el tiempo y no en sí mismos.

Cuando estén delante de un acto de servicio, no se confundan. La confusión proviene de la falta de claridad del propósito de sus acciones. Si concentran su atención en Dios, en seguida verán cómo Él abrirá los caminos y les mostrará la mayor necesidad que, de repente, no era aquella en la que pensaban.

Tanto en Medio Oriente como en Chaco, sus hermanos necesitan ser escuchados y encontrar en ustedes un puente para algo superior. Donen aliento, donen esperanza, donen paz de corazón.

No se muestren inmaduros, inseguros ni sin propósito, porque están siendo guiados de cerca tanto por Nuestras palabras como por la intuición y por el corazón, vehículos que siempre usamos para conducirlos. Por eso, déjense guiar internamente.

Confíen en los que elegimos para coordinarlos y dirigirlos en cada misión, porque a esos corazones estamos unidos de una forma especial. No tengan grandes ideas ni quieran realizar servicios heroicos para contar al final, porque la verdadera misión, que sucede en el espíritu, será conocida por pocos y, será admirada solo por Dios, porque la humanidad aún no aprendió a amar la vida del espíritu y, por más que conozca los hechos espirituales, poco le interesará si no hay resultado material.

Por este motivo les pido otra vez que sean más humildes y obedientes, más unidos de corazón los unos con los otros y todos con el Dios Altísimo. Así se cumplirá el Propósito de Dios.

Aquel que los ama y los guía,

San José Castísimo


Que todos aquellos que aspiran a ser misioneros del Plan de Dios escuchen estas palabras y aprendan a servir. Los espíritus verdaderamente atentos nunca piensan que Yo hablo para otros, sino que toman todo para sí; por eso, crecen y maduran como Dios espera.

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMAN LUCÍA DE JESÚS

Hijo:

Si quieres ver en el mundo la fraternidad como la premisa paralas relaciones humanas, entonces, elige ser fraterno en todas tu necesidades. Ya sabes cómo hacerlo y cómo serlo, pero aún no te dispusiste a salir de tu comodidad para ello.

Sé que para muchos es lindo admirar en el otro el espíritu de servicio y de caridad y mucho más fácil pensar que para uno mismo eso sucederá de otra forma, que serán fraternos y caritativos desde otros puntos de vista, pero no como Dios los llama a vivir.

Tu consciencia ya tiene una voz lo suficientemente retumbante en tu interior para indicarte el camino y mostrarte el momento y las situaciones que necesitan de ti. Sé maduro para decir sí de inmediato y para asumir como lo más importante un acto de caridad, por más simple que sea.

Aprende a estar en el presente sin inmadurez, a asumir, sí, tus responsabilidades y a velar por la tarea que te hayan encomendado,  pero nunca dejando de ayudar al prójimo, cuando se presente cualquier situación.

Recuerda que, antes de emprendedor de Cristo, eres Su siervo. Por eso, antes de pensar en la concreción de tus propias empresas, aunque sean para el Señor, sé tú humilde y siervo del Cristo, que habita en el interior de tus hermanos y que se esconde en el lado oculto de todas las cosas. Si así procedes, ya  verás cuán grandiosa empresa logrará el Señor por intermedio tuyo, que no solo tienes la apariencia, sino también el espíritu en Cristo.

No estés observando a tus hermanos; sé tú único, diferente, auténtico y verdadero en todas las cosas, tratando de vivir lo que ya sabes, sin esperar que los otros lo hagan. Porque también sabes que todo necesita un motor que impulse la transformación; sé tú ese motor vivo, animado por el Espíritu de Cristo.

Entrega tu cansancio en los brazos de la caridad y elige para ti el descanso eterno y no el pasajero. Ya no será el reposo el que nutrirá tus cuerpos en estos tiempos; serán solo la plenitud en el Espíritu de Dios y la vivencia del Evangelio de Cristo los que te mantendrán en pie. Por eso, sé conforme a lo que has estudiado.

No dejes que ninguna indicación de tu mundo interior pase desapercibida para ti; atiende en todo a la voz del corazón; así, ella hablará cada día más alto dentro de ti.

Tu padre y compañero, tu amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL ÓMNIBUS ÁGUILA DE LUZ, DURANTE EL VIAJE DESDE LA CIUDAD DE PORTO ALEGRE, BRASIL, HASTA EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos compañeros:

Ofreciendo Nuestros Corazones al Altar Celestial como parte del Plan de Dios, clamamos a la humanidad que establezca la paz en sus vidas. Pedimos que despierten un poco más a la verdadera necesidad del planeta, porque en los tiempos que llegarán será necesario demostrar mayor consciencia y madurez. Los que hoy están ciegos de espíritu y de corazón buscarán aliento y guía en aquellos que podrán estar mínimamente equilibrados frente a la situación planetaria.

Sepan, queridos, que ante el grado de maldad y odio que vive en los corazones de algunos seres humanos, el estallido de una tercera guerra mundial podrá destruir completamente la vida planetaria. Los corazones de muchos gobernantes solo están sedientos por demostrar poder y superioridad en relación a los demás seres del mundo. Será una batalla entre el caos y el mal, naciones querrán demostrar su poder y se aliarán unas con otras para destruir a las demás, de acuerdo con sus creencias.

Solo observen el mundo a su alrededor y tórnense capaces de vislumbrar una prioridad mayor que sus propias vidas, porque el Plan de Dios trasciende a los individuos y, si fuere necesario, el Señor pedirá más a aquellos que creen que ya entregaron todo, porque no solo el planeta, sino también el universo necesita de eso.

Les pido que traten de conocer la verdad que se encuentra en sus corazones, para que no sean tomados por el terror que se extenderá por el mundo. No se desesperen en los días que vendrán, porque el Espíritu de Dios los amparará, siempre y cuando sean Sus siervos y Sus soldados de la paz y de la oración.

No les digo que no padecerán nada; sin embargo, todo sufrimiento y toda prueba que el Señor coloque en sus caminos será para que generen méritos para la salvación de la humanidad.

Les digo que, desde ya, aprendan a amar y a aceptar las diferencias, porque les pediremos que acojan y amparen a seres que son muy diferentes de ustedes, desde todos los puntos de vista.

También en este día, les rogaré que ayuden a los misioneros de María para que pronto lleguen a Medio Oriente, antes de que sus puertas se cierren definitivamente y las almas que están allí, buscando una salida, no encuentren la Misericordia, sino solo la Justicia.

El servicio que pedimos a los misioneros, que están consagrados en espíritu y alma al Plan de Dios y de Sus Mensajeros, no es como cualquier servicio prestado en el mundo. Por intermedio de ellos, Nosotros podemos ingresar más profundamente en el planeta y derramar un caudal de Misericordia sobre aquellos que no la merecerían en esta vida. 

Por eso, compañeros de Mi Casto Corazón, esfuércense todos los días para estar más despiertos, porque Nosotros ya no tenemos cómo alertarlos. El tiempo del cambio ya llegó.

Su amado padre y amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Para comprender la realidad planetaria, es necesario que el alma, el espíritu y los cuerpos materiales se dispongan a la transformación, porque la incomprensión de la verdadera realidad del mundo en el cual viven es un artificio de la mente y, a veces, del alma que no quiere abandonar las cosas superfluas y superficiales.

Queridos compañeros y siervos de Cristo:

La imposibilidad que muchos sienten de responder a la urgencia de los tiempos, con una consciencia real de la situación de la humanidad, es causada por la no adhesión de ciertos aspectos del ser al Propósito Divino.

Deben meditar de corazón en lo que les digo y buscar aquellos espacios de la consciencia que aún aspiran a vivir su propia voluntad e insisten en responder a los estímulos de la vida material, por el placer y la comodidad que ocasionan a los cuerpos.

Busquen un camino de santidad verdadera; sigan los ejemplos dejados para el mundo por aquellos que hoy los guían en los planos internos del planeta.

Les pido que reflexionen un poco más profundamente sobre sí mismos y que se encaminen hacia una definición en todos los aspectos de la consciencia.

Encuentren aquellos espacios oscuros del propio ser que aún necesitan que el espíritu los ilumine y, sin miedo, angustias ni preocupaciones con lo que encontrarán, solo encamínense con
madurez hacia la transformación. 

Ya saben lo que deben dejar de hacer. Si ustedes están en duda con respecto a los pasos que deben comenzar a dar, entonces no den aquellos que saben que los llevarán por caminos que no son los de Dios.

Sepan, queridos, que el Creador cuenta con muy pocos. Con madurez, asuman la responsabilidad de formar parte de esos pocos que tienen la posibilidad de responder a Dios y entréguense sin demora a Su Divina Voluntad, que es perfecta para cada uno de ustedes.

Con pocas palabras, les digo lo que necesitan escuchar.

Que Mis instrucciones se tornen vivas por medio de sus corazones, de sus almas y de sus espíritus.

Les dejo Mi bendición paternal.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando un alma ora de corazón, crea las condiciones para la aproximación del espíritu. Cuando él está despierto, permite que leyes superiores permeen la materia y conduzcan los acontecimientos de la vida de acuerdo con principios divinos y universales, que responden a la Voluntad de Dios.

Solo cuando un ser se abre para la vida espiritual y despierta la fe en lo que no puede ver con sus ojos físicos, todo aquello que es una realidad en el cosmos puede hacerse sentir en su corazón. 

Cuando el alma despierta es que la personalidad siente la imperiosa necesidad de descubrir lo que está más allá de la vida material. Es el alma quien hace que la mente y las emociones no estén conformes con la vida de superficie y, así, dispone los cuerpos tridimensionales para una búsqueda superior.

Mientras ustedes aprenden y crecen en espíritu, el alma lucha constantemente con los aspectos que aún están muy arraigados en las tendencias de la vida material planetaria. Por esta razón es que, al mismo tiempo en que aspiran a lanzarse al abismo de la Voluntad Divina y entregarse al misterio que es vivir bajo esa Voluntad, otra parte del ser duda de la existencia de ese abismo, de la posibilidad de vivir la Voluntad de Dios y, según las propias resistencias, ustedes pueden dudar, incluso de la Existencia Divina.

Cuando el espíritu se aproxima a la materia, el alma se fortalece y sus convicciones se convierten en la verdad que rige la vida. Las dudas y los cuestionamientos no dejarán de existir, porque en cuanto estén en el mundo siempre habrá algún aspecto que purificar; aspecto que no quiere sacrificarse y que prefiere mantenerse en la vida común de las gratificaciones y los placeres mundanos. Pero será como un adulto que vive como un niño reclamando, a veces más, a veces menos, al demandar atención para hacer su voluntad.

¿Por qué les digo esto?

Porque ustedes necesitan dejar de darle tanta atención al niño dentro de ustedes que no quiere crecer; deben comenzar a actuar con la consciencia del espíritu, con el adulto espiritual que comprende la realidad planetaria y que está dispuesto a vivir según los designios superiores, sin importarle las circunstancias.

Muchos niños internos están disfrazados de grandes héroes, porque están totalmente dispuestos a cambiar el mundo, siempre y cuando protagonicen grandes papeles en el fin de los tiempos. Sin embargo, cuando se habla de transformarse por medio de las pequeñas cosas de la vida, ya no le dan tanta importancia y piensan, por ejemplo: “¿Para qué aceptar humillaciones, vivir en obediencia, silencio y sacrificio, cuando puedo realizar un gran servicio en África?”.

Sepan, Mis queridos, que les hablo a sus corazones. Sin embargo, hoy les hablo sobre todo a sus consciencias, porque llegó el tiempo de comprender que la única salida, para que la humanidad no sea un proyecto muerto en la memoria de la Creación, es que cada uno asuma la propia transformación y viva en sí los Principios de Dios, depositando en la consciencia humana los códigos de una raza redimida.

Si no redescubren la vida del espíritu y no se dejan transformar por el poder de la oración, jamás descubrirán que la salvación y la redención de las almas del mundo entero dependen de cada uno.

Nuevamente les digo que permitan que la prioridad de sus vidas sea la oración por el planeta, el servicio y el amor que todo lo transforma.

Yo los amo y los guío en los pequeños detalles, para que sus consciencias despierten a la vida superior.

Oren y transfórmense. Imiten a Cristo todos los días, sigan Sus Pasos. El mundo necesita que así sea.

Su amado padre y compañero,

San José

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos compañeros:

Hoy quiero decirles que, a medida que las consciencias se disponen a vivir grados más amplios de madurez espiritual, Dios les da a conocer verdades mundiales que trascienden las barbaridades físicas que viven los hombres en el mundo.

El gran pesar de Dios es el sufrimiento de las almas que mueren día a día sumergidas en la incomprensión y, así, no consiguen salir de los estados de consciencia que son los infiernos creados por el caos y por el mal.

Ustedes son llamados, en este momento, para ser verdaderos compañeros de Dios y de Su Hijo y, de esa forma, compartir con Él Sus dolores y no permanecer en las mezquindades diarias de sus vidas.

Dios los llama a la madurez y, cuando Su Hijo les hace conocer Su constante agonía, causada por el mundo, es para que caminen rápido hacia el olvido de sí y reconozcan que existe un Plan Superior, cuya manifestación depende del despertar y de la madurez de aquellos que se comprometieron con el Creador en el principio.

Este momento que ustedes viven está indicando la hora de salir de sí y asumir la tarea planetaria que, como grupo, les corresponde.

El Señor está dando a conocer realidades que muchos no están preparados para enfrentar, porque el mal se precipita en el mundo y avanza cada vez más, logrando que las almas pierdan la fe y la esperanza y que las esencias se extingan por completo.

Una esencia que se extingue y se desintegra, Mis amados, es como una parte de Dios que deja de existir. Recuerden que cada esencia creada por Él es una parte viva de Su Divina Consciencia, enviada a la Creación manifestada para cumplir una misión.

Les pido ahora que acepten este ofrecimiento que les fue entregado como una gracia para servir a Dios conscientemente y que no se pierdan en los problemas banales de sus vidas; sino que se dejen transformar y moldear por el rayo de la divina humildad y se unan en oración al Padre por la salvación del planeta.

Cada paso que ustedes dan en dirección a la Luz es un paso de toda la humanidad rumbo a un nuevo tiempo.

Maduren de corazón y en consciencia, pues no hay más tiempo que perder consigo mismos.

Yo los amo y los conduzco a un nuevo ciclo planetario.

San José, eterno siervo de Dios

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Sean agradecidos y tórnense dignos de escuchar las Palabras de Dios por medio de Sus Mensajeros.

En la simplicidad del corazón, agradezcan por no estar sumergidos en el común de la humanidad que ignora la existencia de Dios.

Mientras están hoy delante de Mi Corazón, existen muchos otros que deberían estar al lado de ustedes y, sin embargo, ignoran su compromiso con Dios y con Su Plan. Mientras la humanidad se purifica a través del sufrimiento y del caos, ustedes se purifican por la consciencia.

Mientras el mundo se pierde en las tecnologías y en los supuestos avances materiales, sus espíritus intentan crecer y avanzar en el cumplimiento de un Plan Superior.

Los Ojos de Dios están fijos en la pequeña parte de la humanidad que aún tendrá una oportunidad de manifestar Su Propósito, pero para esto, ustedes deben asumir la propia transformación con madurez y no con pesar.

No lloren más ni pidan perdón por los errores cometidos. Reconozcan la gracia que recibieron para dar nuevos pasos y no pierdan la oportunidad de crecer.

La Voz de Dios siempre se pronuncia para llevarlos a la evolución. Escuchen con atención las correcciones de la vida y sigan el camino señalado por el Creador, y no los propios caminos.

La cura de todos los males está en jamás perder la fe del corazón y, con esa fe inquebrantable, dar los pasos rumbo a la transformación, sin lamentarse, solo con profunda gratitud.

La gratitud es la llave para vivir la Voluntad de Dios y dejarse moldear por ella. Nunca la pierdan de vista.

Si tomaran con seriedad y madurez las metas propuestas por el Señor y caminaran decididos hacia ellas, todo lo que sucede a su alrededor se acomodaría, porque el Rayo de la Voluntad de Dios vendrá en su auxilio.

Cada uno tome para sí todas las palabras pronunciadas hasta el día de hoy y camine sin miedo a perderse de sí mismo.

Por el crecimiento espiritual de la humanidad y por el despertar de todos los seres, Yo los bendigo.

San José Castísimo, servidor del Supremo Dios

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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