Las grandes Consciencias Universales se reúnen en el espacio tiempo para colaborar en la liberación del planeta y de la humanidad.
Para eso, en estos días, esas grandes Consciencias Universales visitan los océanos del mundo para aliviar a todas las criaturas que en ellos habitan, y para sanar, espiritualmente, las heridas causadas por la intervención del ser humano en la contaminación, el maltrato, la explotación y el caos generado en las diversas especies marinas.
En ese sentido, las grandes Consciencias Universales, en sus aspectos sutiles de Luz, limpian y purifican los océanos porque también la consciencia mayor de los océanos padece todo lo adverso, lo que la humanidad ocasionó a lo largo de los tiempos.
Las grandes Consciencias Universales se unen en luz y en espíritu, en amor y en solidaridad, para que toda esta situación grave de los océanos sea aliviada y traiga, para todo lo creado, la renovación y la paz.
Así, los océanos son ayudados y nuevos principios internos son depositados en el alma de los mismos para que hagan sentir al hombre de superficie la importancia de su cuidado y protección.
Es por esa razón que, en los más jóvenes, está despertando el interés y el impulso por el cuidado del planeta, para que ciertas corrientes adversas que manipulan al ser humano sean liberadas por medio del estímulo del Amor y de la Luz crística y todo se vuelva a regenerar.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Su Maestro y Señor, Cristo Jesús