Lunes, 7 de diciembre de 2015

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando la Voluntad de Dios se expresa en el universo, todas las estrellas y todas las consciencias evolutivas se unen al Propósito Divino. Son las Leyes de la Obediencia y de la Unidad, que  reinan entre los mundos confederados, que permiten la disolución de todo lo que obstaculiza la Voluntad Superior. 

Para que la Voluntad de Dios se manifieste en la Tierra, así como es en el universo, aquellas consciencias que responden al Plan y lo aman por encima de todas las cosas, incluso más que a sí mismas, deben unirse a ese Propósito bajo el espíritu del amor y de la fraternidad. El triunfo de Dios es una ley; sin embargo, las criaturas que habitan en este mundo, así como en todos los otros, necesitan adherirse al Propósito Divino y dar muestras de su adhesión, no solamente con el verbo, sino también con las acciones y con el esfuerzo consciente para vivir la propia transformación.

Un nuevo ciclo se precipita sobre el mundo; es la Voluntad de Dios que se manifestará. El Señor ya dio Su ultimátum sobre el Plan de la Tierra y pide definiciones claras a los espíritus
encarnados en ella.

Los seres reconocen, internamente, la necesidad de un cambio inminente y completo; aunque reconocer esa necesidad no es suficiente, porque se necesitan manifestaciones concretas de espíritus en evolución, ejemplos que puedan servir de guía para los que despertarán en el último segundo, antes de perder por completo la evolución.

El ciclo que se iniciará en este mes de diciembre tendrá como finalidad dar un último gran impulso a las consciencias encarnadas, a las almas que se perdieron en los abismos planetarios,así como también a los Reinos de la Naturaleza.

El Creador hará descender Su Potencia Solar como una señal, que dará a las consciencias de todas las criaturas del planeta, de que está entregando lo mejor que hay en el universo como regencia y guía para todos, para que, así, ustedes también sean impulsados a entregarlo todo.  

Ese movimiento universal generará resistencias en su concreción, dentro y fuera de los seres; sin embargo, aunque pocos afirmen su entrega y adhesión al cumplimiento del Plan y a su inmediata autopurificación para que él sea una realidad, este será el permiso que el Creador necesita para actuar plenamente en toda la consciencia planetaria.

Ahora, más que nunca, ustedes necesitarán desarrollar el espíritu de la fe y colocar en práctica la fraternidad y la unidad entre los seres, algo que fueron aprendiendo en los últimos tiempos.

La oscuridad resistirá, pero de la persistencia nacerá el amor, principio del triunfo del Creador en el corazón humano.

Más que contar con su fortaleza interior, afiancen la unidad entre los espíritus congregados para cumplir esta misión. Recuerden lo que les digo, porque la unidad es primordial en todo el universo para que se cumpla el Propósito de Dios. En donde haya unidad, ahí estará el Espíritu Divino.

Les dejo Mi paz y Mi bendición paternal para los tiempos que llegaron al mundo.

Sus acciones de hoy, de ahora, les indicarán los pasos para el instante siguiente de sus vidas. Es hora de despertar al momento presente y escribir con el corazón la propia historia, la historia de la humanidad y, en consecuencia, la historia de este universo.

Su compañero e instructor de siempre,

San José Castísimo