Martes, 19 de marzo de 2013

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Es un paso de la consciencia reconocer que ustedes cometen faltas contra Mí, Mi Corazón los librará de todo para que no se sientan culpables.

El camino de la trascendencia de sí comienza cuando la consciencia terrena despierta para la Vida del Espíritu, pues buscando esa unión con Mi Padre todos los días, el alma se puede reaproximar. 

Ahora que los tiempos cambian, Mi Corazón observa las grandes faltas en el mundo; la entrega y la confianza en Mi Espíritu por parte de todos aquellos que en consciencia reconocen sus errores, permiten aliviar Mi Corazón, transforman esos errores en amor y restauran, a través de la oración, las consecuencias de esas faltas.

Mi Amor por ustedes es infinito, y cada falta que es reconocida por Mi discípulo y es ofrecida a Mí, significa la victoria de Mi Reino de Amor en el corazón de todos los seres. No tengan miedo de decirme qué es lo que aún los ata a esta vida material; aguarden confiados el auxilio de Mi Corazón que siempre estará en el momento justo.

Los reúno en torno a Mi Corazón para que recuerden que no los juzgaré por aquello que les hace tropezar en la vida día a día. Yo Soy el Libertador del mundo y Soy el Pastor del Amor que quiere irradiar sobre ustedes las infinitas luces de Su Corazón para que así encuentren la Luz en el camino.

Si están a oscuras enciendan Mi Luz, llamando por la fuerza de Mi Amor Redentor; siempre vendré en su auxilio para que con valentía sigan el camino de la consagración y de la transformación. Los levanto del suelo para que vuelvan a caminar siguiendo las huellas de Mis Pasos. Si Mi discípulo se transforma, como consecuencia transformará al mundo y todo se salvará a su debido tiempo.

Bajo la Luz Eterna del Padre, sean bienaventurados.

Gracias por guardar Mi Luz en sus corazones.

Cristo Jesús, vuestro Consolador

 

En este mismo día, Cristo entregó un segundo mensaje presentando el inicio de un ciclo de instrucciones mensuales que San José transmitirá a la vidente Hermana Lucía de Jesús.

Queridos hermanos:

Alabados sean María Santísima y San José, Padres de la Sagrada Familia.

Que en este día de Gloria reverbere en ustedes el Humilde Espíritu de Amor del Bienaventurado San José Castísimo. Que abriendo el manantial de sus corazones reciban el Bálsamo 
Divino de la Gracia del Obrero de Dios.

Seguidores Míos, que este día de encuentro celestial y universal con el Casto Corazón represente para ustedes un nuevo camino de confianza en los Planes del Padre.

Después de lo vivido en el pasado, los Sacratísimos Corazones de Santa María y de San José se dirigen de manera especial al mundo y a las almas para que toda la humanidad reconozca la importantísima devoción a estos Sabios Corazones Crísticos con el fin de:

- Liberar las faltas graves del mundo - Vivir los Sacratísimos Corazones en el espíritu, como Fieles Mediadores ante Dios

- Poder salvar al mundo de consecuencias irreversibles

- Establecer por más tiempo la paz en el mundo.

Estos Sacratísimos Corazones se han ofrecido amorosamente para ser el puente seguro de luz para llevar a las almas hasta el encuentro con el Maestro Jesús, como también se ofrecieron para despertar una verdadera devoción por el Sagrado Corazón de Jesús.

Queridos Míos, ustedes así podrán comprender con sus corazones que la especial venida celestial del Castísimo Corazón de San José despertará en ustedes un amor más profundo por Dios, por medio de la Paternidad Espiritual que el amado San José irradia hacia los hijos del Padre.

Mediante la unión de los Sacratísimos Corazones de Santa María y de San José con el Venerable y Bendito Corazón de Jesús, la humanidad, en este Nuevo Tiempo, podrá recibir la Gracia de reparar todas las faltas que han sido generadas durante el siglo XX.

El poder del Amor de la Sagrada Familia es un precioso proyecto de vida que está en los Planes de Dios y que se gestará en la próxima humanidad. La actitud de amor y entrega de ustedes al Castísimo Corazón de San José determinará la posibilidad de que este Santo Padre Espiritual de las almas pueda in terceder por el mundo ante el Trono del Padre por más tiempo.

Que el ejemplo de humildad y devoción, como también de virtud, representado por la confianza que San José tuvo en Dios, inspire en ustedes el despertar de esa confianza y el amor por los Designios del Padre.

Que en esta era, el 19 de marzo de 2013 pueda permanecer guardado como recuerdo y bendición para todos. Que el Santo Padre de las familias acompañe a cada uno de ustedes y una a todas las familias del mundo para que, en estos tiempos, estén en el Eterno Corazón de Dios.

Reciban esa Gracia Divina como si nacieran otra vez ante los Ojos del Padre para que, unidos al Amor Infinito de los tres Sagrados Corazones confirmen su entrega en ayuda y servicio a la humanidad, sobre todo al Dios del Amor.

Bajo el Espíritu del Amor de Dios, sean bienaventurados.

¡Júbilo y alegría! ¡

Salve amado Corazón de San José!

En la Paz,

Cristo Jesús